Oaxaca, Oax.- Organizaciones adheridas al Foro Oaxaqueño de la Niñez (FONI), sociedad civil e integrantes de la iglesia católica, exigieron la pena máxima contra Gerardo Silvestre Hernández, sacerdote responsable del delito de violación sexual contra dos niños de Villa Alta, Sierra Norte de Oaxaca, cometido en repetidas ocasiones durante el 2009 y 2010.
Los representantes de los organismos defensores de los derechos de la niñez lamentaron que a 19 meses de la detención del párroco, el Juez Mixto de Primera Instancia del Distrito de Villa Alta no ha dictado sentencia definitiva.
A través de una carta que enviaron al titular del poder Ejecutivo, Gabino Cué Monteagudo y el presidente de la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca, Arturo Peimbert Calvo; los representantes de más de una docena de organizaciones civiles demandaron la reparación del daño a las víctimas y garantía de no repetición.
Uno de los firmantes, Alberto Athié Gallo, exsacerdote y activista por los derechos de la niñez, señala que desde el 2006, Hernández Silvestre desde su primera parroquia arrastra antecedentes de violencia sexual contra menores.
En tanto que en su estancia a Camotlán, donde fue removido, hay denuncias por presuntamente 45 menores víctimas de agresiones sexuales por parte del sacerdote, las cuales se repitieron en parroquias de Villa Alta, San Juan y Santa María Ozolotepec por un periodo total de 6 años, todas ellas comunidades indígenas.
Luego de la aprehensión del presbítero, de las denuncias y declaraciones de las víctimas que dan cuenta de la responsabilidad en los hechos, los representes del FONI exhortaron al ejecutivo estatal "que al dictar la sentencia al agresor, sea en el sentido de imponer la pena máxima, sin atender las presiones que la Iglesia pueda hacer y en su caso, se investigue también a la jerarquía católica por el delito de encubrimiento".