Más que satisfactorio resulta que plantear la creación de la Secretaría de Asuntos Agrarios, para solucionar los conflictos del ramo, haya encontrado eco en la propuesta de abogados oaxaqueños.
Es una verdad axiomática que no existe una atención integral a los conflictos agrarios en Oaxaca por la dispersión de esfuerzos al ser tratados en diferentes Organismos Públicos Estatales.
Ello, dificulta tener una línea política pública clara y eficiente en materia agraria, advierten los integrantes Asociados Numerarios del Colegio Oaxaqueño de Abogados en Materia Agraria, A.C.
Los conflictos son manoseados por la Junta de Conciliación Agraria, Comisión de Límites y la Comisión para la Regularización de la Tenencia de la Tierra Urbana del Estado de Oaxaca
Afirman que fusionar diversas dependencias en una sola Secretaría, ahorraría gasto público como consecuencia de eliminar áreas administrativas afines y el uso compartido del equipo técnico de medición que poseen las referidas dependencias.
Por lo anterior, proponen la creación de la Secretaría de Asuntos Agrarios del Estado de Oaxaca, que aglutine todas las dependencias de la materia a fin de tener una política vertical e integral para la solución de los conflictos agrarios e impulsar la regularización de la tierra.
Al tener una dependencia exclusiva en materia Agraria con el rango de Secretaría, se podría prevenir y solventar de forma adecuada los múltiples conflictos en la materia, además de servir de enlace con las diferentes entidades y dependencias Federales.
Su creación demostraría una respuesta concreta, efectiva y real del Gobierno Estatal que preside Alejandro Murat para atender las necesidades indispensables del Estado, subrayan los directivos del Colegio de Abogados Oaxaqueños en Materia Agraria, encabezados por Juan Maldonado Vargas.
Recuerdan al Ejecutivo y al Secretario General de Gobierno, Héctor Anuar Mafud, y al Coordinador General de Asesores que el Estado de Oaxaca cuenta con una superficie territorial de 9,395,976 hectáreas.
A la Propiedad Social corresponden 7,408,198 hectáreas, divididas en 1,643,888 hectáreas Ejidales y 5,764,310 hectáreas Comunales; repartidas en 1588 núcleos agrarios del Estado, de los cuales 853 son ejidos y 735 comunidades agrarias, muchos de ellos ubicados en la compleja orografía del Estado de Oaxaca de difícil accesibilidad.
La problemática agraria en el Estado tiene principalmente cuatro vertientes: a) Problemas de límites; b) El ordenamiento de la tenencia de la tierra; c) Los procedimientos de conciliación agraria y; d) El Desarrollo de las capacidades de los diferentes sujetos agrarios que les permita lograr un mejor aprovechamiento de los recursos naturales de forma sustentable.
Para realizar una reforma integral en materia agraria en el Estado de Oaxaca, se requiere que el Congreso del Estado: Derogue el artículo 91° de la Constitución Política del Estado de Oaxaca, el cual contiene la organización de la Junta de Conciliación Agraria.
Derogue la fracción XII del artículo 79° de la Constitución Política del Estado de Oaxaca, que establece la facultad del Gobernador de nombrar a los miembros de la Junta de Conciliación Agraria.
Abrogue la Ley Orgánica de la Junta de Conciliación Agraria del Estado de Oaxaca.
Adicione la fracción XIX del Artículo 27° de la Ley Orgánica del Poder Ejecutivo del Estado de Oaxaca para crear la Secretaría de Asuntos Agrarios.
Adicione el artículo 47-A de la Ley Orgánica del Poder Ejecutivo del Estado de Oaxaca, en donde se establezcan las funciones de la Secretaría de Asuntos Agrarios.
Por su parte, el Gobernador del Estado de Oaxaca, Alejandro Murat Hinojosa, deberá llevar a cabo las siguientes acciones:
La extinción mediante Decreto del Órgano Desconcentrado denominado “Comisión de Límites del Estado de Oaxaca” (CLEO).
La extinción mediante Decreto del Organismo Descentralizado denominado “Comisión para la Regularización de la tenencia de la tierra urbana del Estado de Oaxaca” (CORETURO).
Una vez creada la Secretaría de Asuntos Agrarios del Estado de Oaxaca, ésta deberá expedir su Reglamento Interno, estableciendo sus facultades de acuerdo a lo que establezca la Ley Orgánica del Poder Ejecutivo.
Al tratarse de una reforma que toca a dos Poderes del Estado (Legislativo y Ejecutivo), los artículos transitorios de las modificaciones deben ser precisos y sucesivos para que no exista un vacío legal.
En la Exposición de Motivos que entregarán al Congreso del Estado, refieren que Oaxaca aparte de tener una división territorial agraria, tiene una división política territorial municipal, establecida en 570 municipios que, a su vez, se dividen en 12,923 localidades, de las cuales 10,865 se encuentran habitadas y 2,058 están deshabitadas.
En el Estado de Oaxaca, de los 570 Municipios, 496 contienen de 1 a 10 núcleos agrarios, mientras que 74 Municipios no tienen definido su régimen de tenencia de la tierra; es decir, no están definidos como tierras ejidales, comunales ni como pequeña propiedad, lo cual representa uno de los más graves problemas al no existir certeza jurídica sobre la tenencia de la tierra. Por lo anterior, el conflicto agrario en el Estado tiene una problemática compleja ya que involucra el control del territorio político administrativo con el control del territorio agrario.
El Estado de Oaxaca cuenta con una población urbana en la que los Oaxaqueños residen en localidades de 2500 o menos habitantes, lo que implica una gran dispersión poblacional en pequeñas comunidades; territorialmente, los pueblos y comunidades indígenas comprenden la mayor parte de la entidad. A lo anterior, se debe agregar la complejidad de la concepción del territorio que los 16 pueblos indígenas del Estado manejan desde su histórica cosmovisión.
La compleja organización social y territorial dentro del Estado, históricamente ha generado diversos conflictos en la propiedad y tenencia de la tierra.
Según datos emitidos de manera conjunta por la Secretaria de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, la Procuraduría Agraria, el Registro Agrario Nacional, y el Gobierno del Estado de Oaxaca, en el año 2010, existían un total de 532 conflictos agrarios de los cuales, 34 eran considerados de alto riesgo, 59 de mediano riesgo y 439 de bajo riesgo.
Asimismo, los conflictos agrarios de bajo riesgo, se dispararon en un 50% a conflictos de mediano riesgo. Sin embargo, no se creó una Dependencia del Gobierno del Estado que le diera seguimiento a la atención de los conflictos y actualización de los datos estadísticos, así como la solución de los mismos; ya que en los anteriores gobiernos, únicamente se administraban los conflictos que surgían dando una atención de manera reactiva a cada uno y no preventiva; es decir, no se ha operado una atención puntual y permanente a los conflictos territoriales y de tenencia de la tierra en el Estado por falta de una Política Pública integral y vertical por parte del Gobierno del Estado.
En el Estado de Oaxaca existen diversos conflictos de límites territoriales entre diversas comunidades, siendo necesaria la intervención por parte del Estado con la finalidad de lograr una adecuada conciliación de los mismos, tomando en cuenta factores como la pobreza, la marginación y el difícil acceso a las comunidades debido a la orografía Estatal.
La atención de conflictos agrarios no se reduce a la conciliación de las partes, sino que, además, se debe impulsar de manera integral el desarrollo de las capacidades de los hombres y mujeres del campo a fin de fortalecer el aprovechamiento de sus recursos naturales de manera sustentable.
Es necesario que el Gobierno del Estado coadyuve con las Dependencias Federales correspondientes en la regularización de la tenencia de la tierra en los ejidos y comunidades ubicados en zonas urbanas, a fin de dar certeza jurídica a la tenencia de la tierra y poder incentivar la vivienda.
Se requiere de un Órgano del Estado que aglutine las funciones que realizan la Junta de Conciliación Agraria del Estado de Oaxaca, la Comisión para la Regularización de la Tenencia de la Tierra Urbana del Estado de Oaxaca y la Comisión de Límites del Estado de Oaxaca, a fin de tener una Política Pública homogénea en la materia agraria y de regulación de la tenencia de la tierra.
Se requiere de un Órgano del Estado que establezca una relación fluida y coordinada con las Dependencias Públicas Federales relacionadas con los asuntos de carácter Agrario, a fin de coadyuvar en la atención de los conflictos de límites agrarios; la regularización de la tenencia de la tierra en la propiedad privada; en la regularización de la tierra de la propiedad social, así como la regularización de los sujetos agrarios; fomentar el fortalecimiento el desarrollo de las capacidades de los hombres y mujeres del campo, bajo una política pública integral, homogénea y vertical en materia agraria y de tenencia de la tierra.
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