Esta actividad que se realizó en la víspera de los festejos por el 485 aniversario de la elevación al rango de ciudad a la entonces Villa de Antequera – hoy Oaxaca de Juárez- inundó a la capital del estado con muestras vivas de cultura, evocando entre la ciudadanía la fortuna y el privilegio de habitar en una urbe, cuyo centro histórico y vestigios arqueológicos son considerados Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO.

La Noche de Gigantes inició con una calenda que estuvo acompañada por músicos oaxaqueños que a través de sus instrumentos de viento honraron a la ciudad. Además de cerca de 50 monos de calenda aportados por los 2 mil prestadores de servicios turísticos del municipio, quienes acompañaron esta actividad que partió del atrio del Templo de la Preciosa Sangre de Cristo para continuar sobre el Andador Turístico y la Cruz de Piedra, para retornar sobre García Vigil y culminar sobre la Alameda de León.